
SARS-CoV-2 (COVID-19)
El diagnóstico microbiológico del COVID-19 se ha basado hasta ahora en todo el mundo, en la detección del material genético (ARN) viral del SARS-CoV-2 mediante técnicas de PCR, en muestras respiratorias de pacientes con síntomas compatibles. La PCR es una técnica muy sensible y específica, que se realiza en los laboratorios de microbiología para el diagnóstico de diversas enfermedades infecciosas. Por estos motivos, actualmente la PCR es la técnica diagnóstica de referencia para la infección activa.
Los estudios de dinámica de generación de anticuerpos frente a SARS-CoV-19 han mostrado que éstos comienzan a producirse a partir del 6º día del inicio de síntomas a la vez que se observa un descenso de la carga viral. A los 7 días, casi la mitad de los casos tiene anticuerpos totales y a los 15 días casi el 100%, tanto en los casos leves como los graves. Basado en esto, las técnicas de anticuerpos buscan detectar la respuesta inmune de los pacientes la cual aumenta según avanza la infección y ofrecen por tanto la posibilidad de detectar enfermedad activa de varios días de evolución. La presencia de anticuerpos por otro lado, no excluye la posibilidad de seguir siendo transmisor del virus.
La detección de anticuerpos de tipo IgA, IgM e IgG frente al COVID-19 mediante el test de referencia es el Inmunoensayo cuantitativo.
La sensibilidad y especificidad de los tests serológicos IgG + IgM o IgA combinados es cercana al 100%.
Los anticuerpos de tipo IgA e IgM son marcadores de infección reciente y presentan características de utilidad similares. Ambos son marcadores tempranos y se detectan en un 90 % de los casos entre los días 4 a 7 de la infección, siguen aumentando hasta el día 14 y luego empiezan a disminuir.
Los anticuerpos de tipo IgG se detectan algo más tarde (media día 8 post infección), y aumentan hasta las 3 semanas, aproximadamente. Luego van descendiendo de forma gradual. La valoración cuantitativa de anticuerpos IgG nos permitirá ver la evolución de la infección y los procesos de seroconversión, así como las fases de recuperación.
Cabe mencionar que la prueba de detección de anticuerpos de tipo IgA, IgM e IgG frente el COVID-19 mediante el Inmunoensayo no es la prueba rápida de detección de anticuerpos. Los tests rápidos son pruebas cualitativas (no cuantitativas) y presentan unos datos de sensibilidad y especificidad inferiores.
La Sociedad Española de Inmunología quiere informar respecto a los test de detección de anticuerpos:
La detección de anticuerpos anti-SARS-Cov-2 puede ser muy útil en el estudio de la infección por este virus.
La especificidad de la detección de anticuerpos es alta y un resultado positivo indica respuesta por anticuerpos por contacto con el virus. Según los resultados de Zhao et al 2020, la combina¬ción de PCR y detección de anticuerpos específicos, incrementa el porcentaje de detección hasta el 100% a partir de los 15 días del inicio de los síntomas.
El estudio de anticuerpos específicos es el adecuado para realizar estudios de prevalencia de la infección en población general o en colectivos de interés.
En general, existen 2 tipos de ensayos para detectar anticuerpos específicos:
1. La inmunocromatografía lateral (lateral flow). Son los denominados kits rápidos, tienen la ventaja de la rapidez y facilidad tanto de obtención de muestra como de uso. No requieren personal especializado, ni para la extracción ni para le realización. Podrían ser utilizados en residencias, servicios de atención primaria y urgencias hospitalarias. Hay diferentes tipos de kits rápidos, según detecten IgG e IgM conjunta o separadamente y la sensibilidad y especificidad varían según la casa comercial. No existen estudios comparativos entre los diferentes reactivos comerciales.
2.- Las técnicas de Inmunoensayo requieren de personal especializado para la extracción de la muestra y de equipamiento y personal entrenado para la realización de la técnica. Sin embargo tienen la ventaja de que permiten conocer la clase y subclase de inmunoglobulinas, asi como la cuantificación. Serían los test adecuados para la realización de estudios cinéticos que permitieran analizar de forma adecuada la respuesta inmunita¬ria frente al virus SARS-Cov-2 y la toma de decisiones en base a resultados fiables y contrastados.